Fue un día miserable.
Era una vida en la que no podía morir.
Rhett, que vivía en un suburbio, corre peligro de ser vendida a un aristócrata pervertido.
¡A-ayudenme…!
El intento de defenderse fue bloqueado fácilmente, y pensé que moriría así.
“Ahora estás a salvo”.
Fui salvada por un hombre que nunca había visto antes.
Y una vida de fantasía me fue ofrecida.
Conocí a mis padres, quienes pensé que ni siquiera existían, y recuperé mi verdadero nombre Irina.
Entre la amable gente del Ducado Winfrey, Irina cura las heridas que ha sufrido y crece poco a poco.
“Señorita Irina, quiero que seas feliz aquí”.
El hombre que la salvó, el Duque Logan Winfrey.
Irina se enamora de él como si fuera el destino.
¿Pero por qué?
A pesar de que somos cercanos, siento que algo falta.
¿Por qué te ves tan angustiado?
‘Dijiste que querías que fuera feliz’.
Yo también.
Quiero que seas feliz.
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