Atrapada por el señor oscuro

Al ver a Duque Wallow, la espada que protegía el Norte, y a su padre, el caballero guardián, Celine esperaba ansiosamente el día para encontrarse con su maestro, Damian. Sin embargo el Damian que se presentó frente a Celine, no tenía la dignidad del Norte, sino que era un chico débil con un cuerpo delgado y una sonrisa brillante. Para cumplir con su deber como caballero guardián, Celine está decidida a proteger firmemente a cualquier señor. Sin embargo, algo resulta sospechoso sobre Damian, de quien se pensaba que era débil.