—¿Tiene el nombre de una persona?
Sintiendo una sensación espeluznante, tragué saliva seca.
Enrique asintió aferrándose a mis brazos
«¿Qué demonios es esto…?»
Cuando excavé en el jardín y obtuve las cartas y el diario de la duquesa, escaneé todo lo que había dentro y no encontré nada particularmente sospechoso.
Incluso el crucigrama en el que Enrique dijo que tenía el nombre de una persona me pareció normal y corriente.
El crucigrama es un juego al que juegan damas y caballeros para despejar la mente mientras disfrutan de la hora del té.
—Enrique, no puedo entender por donde lo mire, ¿dónde está el nombre de la persona?
—Aquí.
—¿Hmm?
Enrique tocó la intersección donde se encuentran las palabras horizontales y verticales del crucigrama.
Entrecerré los ojos.
—¿J?
1. PREJUICIO
2. CONJURO
La respuesta al acertijo horizontal No. 1 y la respuesta al acertijo vertical No. 2 fueron las mismas que las anteriores, y la palabra en la intersección de las dos palabras era J.
—La próxima… Aquí.
Y en la intersección de la palabra 3 y la palabra 4, se escribió A.
Mientras movía mi mirada diligentemente siguiendo las yemas de los dedos de Enrique, comencé a conectar todas las palabras en los puntos donde se cruzan las líneas horizontales y verticales.
La palabra completa es-
—¿J.A.M.I.L.L.A…?
Jamilla.
Sorprendentemente, como dijo Enrique, había realmente el nombre de una persona.
—¿Es este el nombre de una persona?
—Si.
«¿Jamilla..? ¿Ese es el nombre de una mujer?»
Había algo que me molestó ante la mera coincidencia.
«En la novela, cuando Mia negoció con el duque Seymour para escapar de los gemelos, solo intercambió las cartas».
Entonces, cuando descubrí la existencia de este diario, me quedé desconcertada por dentro.
Pero si Mia encontrará algo que quisiera ocultar en el diario de la duquesa, sería fácil explicar por qué solo intercambió las cartas.
—Hermana. Pero, hay algo extraño aquí también.
Sin embargo, el nombre femenino ‘Jamilla’ no era lo único.
El número de crucigramas es 22 en lugar de 12.
Lo que salió de la intersección de las diez palabras restantes fue aún más significativo.
—DEMONIO…
Demonio.
«¿Quién diablos es Jamilla, y por qué está relacionada con la palabra demonio?»
¿Podría tener algo que ver con el brujo haciendo un contrato con el diablo?
Enrique me preguntó mientras miraba el crucigrama como una advertencia.
—¿Qué es esto?
—Puede ser un código que alguien plantó en secreto.
Es muy poco probable que la duquesa haya hecho este crucigrama ella misma.
La mayoría de las personas que hacían estos juegos eran sirvientas, y la familia real y los nobles de alto rango se divertían resolviendo los crucigramas que habían preparado de antemano.
—Un código secreto, tengo miedo….
—Enrique. ¿Sabes que tu hermana es la más fuerte del mundo? Si tienes miedo, quédate conmigo hoy. ¿Y me puedes prestar el diario de madre por un momento?
Enrique asintió salvajemente y yo acaricié el suave cabello del chico.
—Pero mi Enrique es muy observador. Es fácil ver algo como esto y dejarlo pasar.
—Es el único recuerdo de mi madre, así que lo veo a menudo. Y es un regalo precioso que me dio mi hermana.
Miré por un momento las esquinas de papel del diario, como si lo hubiera leído varias veces, luego senté a Enrique en mi regazo y le leí un libro de poesía.
Mientras, pensé que fue afortunado que Mia no tirara el diario de su madre y estuviera en manos de este niño.
Después de un tiempo, la cabeza de Enrique comenzó a inclinarse hacia adelante.
Mientras miraba a Enrique que se durmió en un instante en mi regazo diciendo que tenía miedo, me quedé mirando el juego de crucigramas en el que estaban escondidas las palabras «Jamilla» y «Demonio».
«… Primero, tenemos que averiguar quién es Jamilla».
* * *
—¿Adónde estás yendo en lugar de descansar en casa?
Estaba bajando las escaleras con túnicas gruesas para dirigirme a Blanchia, y Belreck, quien me bloqueó, preguntó sin rodeos.
—Estoy llena de energía, pero ¿debería seguir en la cama?
—Esto se debe a que la fuerza detrás del ataque a la Biblioteca Imperial no ha sido atrapada.
De hecho, estaba en camino a investigar las pistas decisivas detrás de eso.
—Pasaré por Armand por un momento. Y aunque su nombre es ese, Seymour está detrás de él, ¿no es así?
—Mmm. Así es.
—Pero, hermano. ¿Parece que tienes algo que decir?
Su expresión se volvió ligeramente seria.
—Circulan rumores de que tienes grandes poderes divinos. Mi padre solo me dijo que te pregunte directamente. ¿Cuál es la verdad?
Hasta ahora, solo Isidor y papá sabían que había despertado poder divino, pero cada vez era más difícil ocultarlo y ya no tenía intención de ocultarlo.
—Así es. Soy una persona mucho mejor de lo que crees. ¿Sientes automáticamente ganas de llamarme noona ahora?
Juguetonamente, hice flotar una esfera blanca de poder divino sobre mi palma y la soplé en la cara de Belreck.
Él, que había sido duramente explotado por su trabajo esclavo, abrió la boca como si estuviera sorprendido por mi confirmación.
—¿R-realmente eres una Santa? Señor Dios..… ¡Debes haber abandonado tu imperio!
Dejándolo atrás, me subí al carruaje y me dirigí hacia Armand.
Al llegar a Blanchia a través del círculo mágico en el sótano de Armand, Isidor, que ocultaba su belleza con magia polimorfa, se encontraba trabajando.
—Es bueno verte.
Cada vez que lo veo, no puedo acostumbrarme a la cara de muñeca sonriente.
—Ha pasado un tiempo desde que te vi.
—Sí te dirigiste aquí en lugar de la Mansión Visconti, es porque debes tener algo que preguntar, ¿no es así?
—Sí.
Me senté, acariciando a Cookie que bostezaba, y él me sirvió té caliente como siempre.
—Maestro, ¿alguna vez ha oído hablar del nombre «Jamilla»?
Inclinó la cabeza ligeramente.
—¿Jamilla? Es un nombre con un acento único. Recuerdo todos los nombres de muchos nobles, pero esta es la primera vez que escucho ese nombre.
Saqué un crucigrama y le expliqué que había encontrado un código sospechoso en el diario de mi madre.
Además, en el futuro que vi, Mia tiró el diario con este crucigrama.
—Según el diario, mi madre era cercana a la emperatriz, por lo que a menudo la invitaban a tomar el té en la corte imperial.
—……
—¿Qué pasaría si una de las sirvientas de la familia imperial conociera la identidad de un brujo dentro de la familia imperial y en secreto hiciera una denuncia a través de un crucigrama?
—Jamilla….
Isidor chasqueó los dedos y un grueso pergamino voló por el aire, enumerando los nombres de la familia real y los nobles.
—En esto, también están escritos los parientes lejanos del emperador. La información ha sido constantemente revisada y organizada por los informantes durante los últimos tres años, por lo que no faltarán nombres. Vamos a buscarlo.
—¿Cuántos nobles hay en el imperio?
Afortunadamente, los nombres están ordenados alfabéticamente.
Sin embargo, no importa cuánto busqué, no pude encontrar el nombre Jamilla.
«Entonces, ¿Por qué está ese nombre en el crucigrama?»
Habiendo caído en un nuevo obstáculo, lentamente abrí la boca luego de ver el nombre de la 4ª Reina llamada «Astella Histach».
—Isidor. ¿Podría obtener una lista de las sirvientas que trabajaron para la 4ª Reina hace 9 o 10 años?
—La princesa parece pensar que la 4ª Reina tiene un trasfondo fuerte. Ella es una Reina de un país extranjero sin fuerzas externas…
Isidor golpeteó su dedo lentamente con una expresión preocupada.
—Pensemos. Aunque eclipsado por mi hermano mayor, Rosad, el 3er Príncipe también, técnicamente hablando, casi se convirtió en un héroe de guerra gracias a la grieta.
—……
—Además, el compañero del debutante de Mia esta vez fue el 3er Príncipe. Debido al halo de Santa, debería haber habido solicitudes de varios jóvenes influyentes para ser su escolta, pero su pareja fue el 3er Príncipe. ¿No es mucha coincidencia?
—……
—Si investigamos a la 4ª Reina, es posible que podamos descubrir la identidad de Jamilla.
—Investigaré a todas las sirvientas que cuidaron de la 4ª Reina.
Unos días más tarde.
Después de una investigación persistente, encontraron a una mujer que había trabajado como sirvienta para la 4ª Reina en el pasado.
La mujer sufría actualmente las penurias de la vida y se encontraba ahora en un pequeño monasterio, haciendo tareas por una pequeña paga.
—Si fuera una sirvienta de la familia real, la paga habría sido buena, entonces, ¿por qué dejó su trabajo como sirvienta de la 4ª Reina?
La mujer, que estaba agarrando el paquete de monedas de plata que le había dado, con una expresión codiciosa, inmediatamente cambió su tez cuando apareció el nombre de la 4ª Reina.
—Siéntase libre de hablar. Nadie te hará daño.
Cuando saqué una bolsa con oro y el sello de Seymour, rápidamente movió los ojos de un lado a otro antes de abrir la boca.
—Dos de las sirvientas con las que trabajé han muerto. Desde muy joven, fue una mujer muy cruel.
—¿Desde la infancia fue sirvienta de la 4ª Reina?
—Hemos estado juntas desde que tenía 15 años, cuando la 4ª Reina llegó del Reino de Nerman al Imperio.
—Entonces, ¿conoce el nombre Jamilla?
En ese momento, los ojos de la mujer se abrieron con asombro.
—¿Cómo sabe la Princesa Seymour el verdadero nombre de la 4ª Reina?
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