Dark?

(Novela) Me divorciaré del hermano mayor de la protagonista Capítulo 37

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¡Ups! Quizás me malinterprete como alguien a quien le dieron una paliza.

 

—Esto.

 

—¿Quién fue?

 

Terence preguntó en voz baja.  No hubo mucha diferencia en su expresión facial o tono de voz en comparación con cuando preguntó si había comido.

 

Pero de alguna manera…

 

«¿Está enojado?»

 

Los ojos rojos del hombre parecían brillar por alguna razón.  En ese momento me quedé completamente sin palabras.  Necesitaba aclarar rápidamente el malentendido, pero no pude abrir la boca fácilmente.

 

—¿Quién fue?

 

La misma pregunta que antes.

 

Extendió su mano hacia mí.  Un dedo sin guante apenas rozó mi mejilla.

 

—¿Quién diablos se atrevió?

 

Prácticamente sentí un contacto piel con piel aunque claramente no me tocó…

 

¿Mis cinco sentidos se volvieron extraños?

 

Mientras me distraía la extraña textura, la flecha se dirigió a otra parte.

 

—Estoy seguro de que te dije que no debía lastimarse ni un solo cabello.

 

Fue una reprimenda sorprendentemente fría.

 

—Lo siento. Fue mi culpa.

 

Vinetta, que estaba detrás de mí, se inclinó con una rodilla en el suelo.

 

Cuando Vinetta fue reprendida por mis tontas acciones, tardíamente recobré el sentido y agité los brazos.

 

—¡No! ¡No fue culpa de Vinetta!

 

—No tienes que preocuparte por eso. Sólo dime quién te puso en esta situación.

 

—… Y-yo.

 

—¿Qué?

 

—Me di una bofetada.

 

Los ojos de Terence se abrieron como platos.

 

—Entonces sucedió algo así.

 

Terence sonrió levemente después de escuchar aproximadamente lo que sucedió durante el día.  La impresionante atmósfera de hace un momento había desaparecido como una mentira.

 

—Fue un gran plan.  Al final resultó como querías.

 

—… Jaja, eso es demasiado elogio.  Incluso en mi opinión, fue un juego un tanto infantil.

 

Miré a Vinetta y le pregunté.

 

—Por cierto. Es mi culpa por no poder responder rápidamente, pero si Vinetta es regañada injustamente, al menos debería explicar la situación.

 

—Es mi culpa, ¿necesito una explicación?

 

—¿Por qué es culpa de Vinetta?

 

—Cuando Ethel-nim me explicó el plan, no pude detenerla.  Yo misma pensé que era eficaz y no había ningún otro método que pudiera sugerir como alternativa.  Como resultado, es lo mismo que no cumplir con la orden del maestro, por lo que no hay nada que decir incluso si recibo el castigo correspondiente.

 

Oh Dios mío. No puedo creer que sea tan terca. Pero, por otro lado, también tenía fe en ese tipo de sinceridad.

 

«Me ha dado un subordinado en el que realmente confía.»

 

Decidimos comer de inmediato y mientras nos dirigíamos juntos al comedor, miré a Terence.

 

Me sorprendió mucho antes.

 

—No sabía que estabas tan preocupado por mí. Ahora la hinchazón ha bajado mucho.

 

La mirada inquisitiva volvió.

 

—¿No es obvio? Nosotros…

 

Las palabras de Terence se apagaron.

 

—¿Nosotros?

 

—……..

 

El silencio se hizo un poco más largo a pesar de mi pregunta.  Nos detuvimos en medio del pasillo.

 

Justo cuando comencé a preocuparme, pensando en decir «¿Dije algo innecesario?»

 

—Porque somos socios.

 

—¿Socios?

 

—Así es. Nos necesitamos el uno al otro.

 

—Así es, Tay me ayudó mucho.

 

Reanudamos la marcha.

 

—Ethel-nim también es de gran ayuda para mí.

 

—Gracias por sus palabras.  Pero como ya  di la receta del té medicinal, es justo decir que mi ayuda terminó.

 

—Mis habilidades no son muy buenas, así que ¿por qué no sigues preparandolo tú misma?

 

—Si practicas un poco, lo aprenderás rápidamente.  Si crees que no podrás, Tay puede decírselo a alguien más y mi trabajo estará hecho…

 

—Está bien, eso es todo.

 

Antes de darnos cuenta, habíamos llegado al comedor.

 

—Tengo hambre. ¿Deberíamos comer primero?

 

En la mesa se prepararon aperitivos ligeros como ensalada y sopa. Obviamente no tenía tanta hambre, pero ver la deliciosa comida me abrió el apetito.

 

—Sí.

 

Mientras comíamos, dediqué un momento a contarle a Terence los detalles de lo que pasó hoy.

 

Ya era pasada la medianoche.

 

—Ah.

 

—¿Ethel-nim?

 

Nos volvimos a encontrar en la terraza, donde a menudo tomábamos té juntos.

 

—¿No puedes dormir?

 

Terence sirvió vino tinto en una copa nueva y me la entregó.

 

—Sí, por eso salí a dar un paseo.

 

No tenía idea de que encontraría a Terence así incluso antes de salir al jardín.

 

—Marqués, ¿salió porque no podía dormir?

 

Él había estado bebiendo vino aquí antes de que yo viniera.

 

—Así es.  ¿Pero es realmente tan difícil llamarme Tay?

 

—Ah, sin siquiera darme cuenta…  Sin embargo, luego de descubrir que usted es el marqués, me resulta extraño llamarlo de esa forma.

 

Aun así, había gente en esta villa que no conocía la identidad de Terence, así que era algo con lo que debía tener cuidado.

 

—Lo siento. Fui descuidada.

 

—No quise culparte…

 

—De ahora en adelante, te llamaré Tay correctamente y Tay también me llamará Ethel.

 

—¿Sí?

 

—Estoy muy feliz de que la persona que pronto se convertirá en príncipe me llame «Ethel».

 

—… ¿Puedo?

 

—Por supuesto. Somos socios.

 

—Ethel.

 

Era una voz muy dulce y profunda como la noche.  Por un momento, un sentimiento de vergüenza se apoderó de mí.

 

¿Qué?  ¿Por qué me siento tan avergonzada cuando solo sacó el «nim»?

 

¿Es porque ha pasado un tiempo desde que alguien de la misma edad me llamó solo por mi nombre?

 

Leandro siempre me llamó esposa y nadie se atrevió a llamarme por mi nombre, ya que era la esposa del joven duque Cassius.

 

—Por favor, llámame así de ahora en adelante.

 

—Entendido, Ethel.

 

—……..

 

Sentía mi rostro encenderse, probablemente por el alcohol, así que intenté frotarla.  No bebí mucho.

 

Terence me miró fijamente.

 

—¿Te encuentras bien?

 

—Oh, ¿por mis mejillas?  Estoy bien.  Me siento mucho mejor. Apliqué medicina y  hielo.

 

—Entonces me alegro. No pude decírtelo antes, pero incluso si es un plan, sería mejor que fueras más considerada contigo mismo.

 

—Hmm, lo tendré en cuenta.

 

—… ¿Qué hay del otro lado?

 

—¿A qué se refiere con el otro lado?

 

—Su corazón.  Por muy mala que fuera la relación familiar, no habría sido fácil cortarla. Lo siento si mi interferencia fue inútil.

 

—Para nada. Estoy bien.

 

Pero no fue una declaración muy convincente.  Terence también me miró como si estuviera mirando a un ser extraordinario que encuentra fuerza en una situación difícil.

 

… No, está realmente bien.  De todos modos, no son realmente mi familia.  Como era huérfana en mi otro mundo, no había nadie a quien pudiera llamar familia.

 

Sólo pensar en la verdadera Ethel me hacía pensar tanto que no podía dormir tranquila.

 

«Si Ethel regresa a este cuerpo más tarde, ¿no me culpará? Abandoné arbitrariamente a la familia Wallace.»

 

Al igual que cuando transmigré a este cuerpo, ¿no es posible que algún día regrese sin previo aviso?

 

Terence, que no tenía forma de conocer mi situación, pareció entender mis preocupaciones de otra manera y me ofreció consuelo.

 

—Fue la elección correcta. Me habría despedido de ese tipo de familia sin siquiera mirar atrás.

 

—¿En verdad?

 

—Sí. Estoy en una situación en la que recibo mucho odio por parte de la esposa de mi padre y, si pudiera, habría terminado la relación hace mucho tiempo.

 

—La situación de Tay es incomparablemente más grave que la mía.

 

Me sentí avergonzada de estar en la misma línea que alguien cuya vida estaba constantemente amenazada.

 

—Es más o menos similar.

 

Su insistencia me hizo sonreír.  Terence también sonrió.

 

—Es la elección correcta.

 

Por alguna razón me sentí un poco aliviada.  Tal vez esperaba que alguien dijera eso.

 

Fue una buena elección.  No una mala.

 

—Gracias.

 

—Bueno. No es necesario decir eso entre socios.

 

Vaciamos nuestras copas mientras admiramos la vista de la villa sumergida en la oscuridad por un rato. Fue un momento que no resultó incómodo incluso si no había mucha conversación.

 

Cuando estaba así con Leandro, me sentía incómoda, así que o interrumpí la conversación o me alejé.  No puedo creer que pueda sentirme tan cómoda con alguien a quien conozco desde hace menos de un mes. Es increíble.

 

Entonces Terence habló.

 

—Ethel, ¿tienes algún plan especial después del divorcio?

 

—¿Por qué lo preguntas?

 

—Tengo curiosidad. Porque somos socios.

 

—Bueno.  No he pensado en nada específico todavía…

 

—Supongo que hay algo allí.

 

No era gran cosa, pero dudé en decirlo.

 

—Quiero dejar el imperio.

 

—… ¿Qué?

 

—Si paso por un juicio de divorcio, mi rostro se venderá por todos lados y la gente seguirá hablando de mí por un tiempo, así que me sentiré agobiada por eso.

 

Si se evitaba el oscurecimiento de Terence, existía una alta posibilidad de que no estallara una guerra civil por el trono, pero de todos modos no había ningún cambio en el plan de mudarse muy lejos.

 

No quería quedarme en el Imperio Asteroth y enredarme con la familia Cassius.  Según la novela, Cassius sigue ganando aún más, hasta el punto de que gana alas y vuela alto.

 

«¡No sé a nadie más, pero no quiero ver a Leandro hacerlo bien…!»

 

Sin embargo, era casi imposible no escuchar noticias de Cassius dondequiera que estuviera en el imperio.  Más tarde, la reputación de Cassius, o más precisamente, de Liena, se extenderá no sólo en la capital sino también por todo el imperio, llegando a un punto en el que todo el mundo ama a Liena.

 

Al final, se casa con el príncipe heredero que asciende al trono y se convierte en emperatriz, e incluso hay una línea que dice que la emperatriz termina siendo más popular que el emperador.

 

Además, el duque Cassius me odiaba por quemar el retrato de Liena.  Si peleo en el juicio, sus sentimientos hacia mí sólo empeorarán, no mejorarán.

 

«Bueno, ya que se trata de la familia del personaje principal, no hay necesidad de venir y hacerme daño después de que me haya ido.»

 

La familia Wallace tampoco me dejaría en paz.

 

En muchos sentidos, no hay nada bueno en quedarse aquí.  Vayamos a algún lugar extranjero con una bonita vista y un lugar tranquilo.

 

Todo lo que tengo que hacer es quedarme allí tranquilamente y vivir del dinero ganado en las minas abandonadas de Andala.  La mina está dentro del imperio, pero basta con tener un administrador independiente.

 

Vivir una vida tranquila, gastando mucho dinero… es lo mejor.

 

Tendré que preguntarle a Laura si está dispuesta a irse conmigo.  Cuando la saqué de Cassius, grité que me ocuparía de su sustento.

 

Si no quiere salir de este imperio, debería buscarle un trabajo digno. Si sólo le ofrezco dinero, se negará a aceptarlo.

 

«En cuanto a los demás…»

 

Cuando estaba en la mansión Cassius, no tenía relaciones cercanas con nadie más que con Laura, por lo que recordaba principalmente los rostros de las personas que había conocido recientemente.  Sharon, Vinetta, etc.

 

Es una pena tener que irme sin poder acercarme a ellos un poco más, pero eso no significa que no nos volveremos a ver nunca más. Sería bueno invitarlos a donde viviré algún día en el futuro.

 

Y la persona que tengo delante justo ahora.  La mejor persona que he conocido recientemente.

 

Terence tenía una expresión extraña en su rostro.

 

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Chapter 37