—¡Tú!
Gabby miró de un lado a otro entre la sangre de mis manos y mi cara.
—No es la gran cosa.
¿Es la primera vez que ves sangre? Hice una expresión de sorpresa ante la reacción demasiado sensible.
—Esto es sangre. ¿Estás realmente enferma?
Gabby me regañó. Luego me preguntó con voz un poco más tranquila.
—Honestamente no te creí cuando escuché que tenías una lesión interna… ¿Pero de repente estás vomitando sangre así? ¿Dónde diablos te duele?
La expresión de Gabby parecía seria. Esa reacción me desconcertó.
—No sé por qué lo preguntas. ¿Somos así de cercanos?
Era literalmente así. Gabby odia a Isabella.
Jesse dijo que siempre odió a Isabella hasta el punto de que ni siquiera la trataba como a una hermana menor.
Después de experimentarlo yo misma, sentí que sabía a qué se refería Jesse.
Los ojos que me han estado mirando desde que entré a esta habitación. Parecía disgustado cuando pensó que lo había llamado por un apodo.
Era una hostilidad bastante clara. Pensé que si fuera un ser humano real, estaría bastante molesta.
Aunque no es nada para un demonio acostumbrado a la malicia.
Pero su reacción hace un momento parecía como si estuviera preocupado por mí.
«¿Pueden los humanos preocuparse por alguien que no les agrada?»
Esto no es algo que suceda con los demonios.
Me imaginé al Señor de la Lujuria escupiendo sangre frente a mí.
Puede que sea una lástima que yo no haya sido la causa de la sangre, pero aun así sería una escena agradable de ver.
«Estúpido Belial. Simplemente escupe toda la sangre de tu cuerpo y muere en el acto.»
Diría esto y me reiría a carcajadas. Podría dormir muy bien esa noche.
Sonreí levemente, sintiéndome bien con sólo imaginarlo.
Pero parece que esa sonrisa estimuló a Gabby.
—¿Qué es esa expresión en tu cara?
La expresión de preocupación en su rostro desapareció de repente.
Si reacciona así cuando sonrío, está claro que me odia.
Ha pasado un tiempo desde que llegué a la Tierra Media y supongo que me cuesta mucho leer las expresiones faciales de las personas.
—¡Tú-+!
En el momento en que Gabby estaba a punto de gritarme.
—¡Pequeño Duque! ¡Tengo algo que decirle!
De repente, Jesse gritó.
Como no había dicho una palabra desde antes y había estado callada, me olvidé de la existencia de Jesse por un momento.
—Ja. ¿Qué quieres?
A Gabby no le gustó que la interrumpieran a mitad de la frase, así que se quejó con voz irritada.
—Tengo algo que contarle sobre el estado de la joven…
—¿Qué sucede?
—Salgamos afuera por un momento…
Cuando Jesse exigió persistentemente una conversación, Gabby no tuvo más remedio que salir de la habitación con ella.
Al poco tiempo.
Gabby, que regresó a la habitación, parecía algo sorprendido.
Después de eso, Gabby siguió abriendo y cerrando la boca como si tuviera algo que decirme.
Lo miré en silencio. Después de dudar un momento, Gabby finalmente cambió de tema.
—Ja. Eso es todo. Primero, llamaré a un sacerdote, así que recibe tratamiento. Como soy el heredero, puedo llamar al menos a un sacerdote bajo mi autoridad.
—No quiero.
Rechacé rotundamente su oferta.
Llamar un sacerdote para un demonio. No quería una broma tan divertida.
—Estás enferma. Reciba tratamiento en silencio.
—No estoy enferma.
—¡Tú-!
Cuando seguí rechazando el tratamiento, Gabby finalmente estalló en ira.
—¿Estás protestando? ¿Crees que te cuidaremos si haces esto?
—¿Por qué necesito tu atención?
El «nosotros» del que habla Gabby son él y el Duque. No necesitaba la atención de ninguno de los dos y, sinceramente, estaba muy molesta en este momento.
—Pequeño Duque. Pensó que estaba mintiendo cuando dije que estaba enferma.
—¡Eso es lo que suele hacer-!
—Eso es todo. Mantén esa actitud. Quiero que haya distancia entre tú y yo.
Gabby se quedó paralizado por un momento ante mis palabras.
Y.
—Sí. Soy un idiota. ¿Por qué debería llamar a un sacerdote para una persona como tú?
Después de decir esas palabras, salió de la habitación sin mirar atrás.
¡Bam-!
La puerta se cerró con tanta fuerza que me dolieron los oídos.
Miré el lugar vacío donde Gabby había estado. Como era de esperar, es difícil entender a los humanos.
Por un momento me preocupó que pudiera notar que el alma de su hermana había cambiado, pero parecía no tener idea.
Me pregunto qué tan indiferente era hacia Isabella habitualmente.
No puedo creer que actúe como si tuviera algo que ver con un tema así.
Pero en ese momento.
«¿Oh?»
Noté pequeños cambios en mi cuerpo.
Mi poder mágico regresó sólo un poco. Si la cantidad de poder mágico que tenía originalmente fuera agua de un lago, sería suficiente para llenar una taza pequeña.
Aunque era una cantidad mínima, definitivamente era mi poder mágico.
«¿Por qué?»
Estuve así durante mucho tiempo.
***
De alguna manera, creo que la habitación de un simple humano es mejor que mi habitación como señor del mundo de los demonios.
Observé a Jesse mientras yacía en diagonal sobre la suave cama.
Jesse estaba encendiendo una vela. Pero por mucho que encienda la vela, al cabo de un rato la llama mengua y se apaga.
Miré la vela apagada y dije de mal humor.
—No la enciendas.
El diablo prefiere los lugares oscuros. Lo mismo sucedía conmigo.
Jesse sollozó y dijo ante mis palabras.
—Necesito encenderlo porque está muy oscuro en la habitación. Pero, señorita, las velas parecen extrañas.
—Aún así no la enciendas.
La razón por la que la luz sigue apagándose en esta habitación donde no hay ni un soplo de viento se debía a mí.
Cuando la vela se encendió de nuevo, usé mi magia nuevamente para apagarla.
Jesse dio una patada en el suelo y sacó una nueva caja de cerillas de su bolsillo. Ya había docenas de cerillas que se habían vuelto negras esparcidas sobre la mesa de noche.
La miré con una expresión triste.
Entonces, de repente, suspiré mientras pensaba en mi estado actual.
Ahora mismo, todo lo que tengo es poder mágico para controlar esa única vela.
Si fuera mi poder original, los monstruos explotarían con solo un chasquido de mis dedos… Mi apariencia actual era tan lamentable que era vergonzoso.
«Detente. Tienes que entrar en razón.»
Me recompuse antes de que mi línea de pensamiento se hundiera en el abismo de la desesperación.
Aunque era sólo una pequeña cantidad, el poder mágico regresó. Algún día, el poder mágico restante regresará.
Pero necesito saber cómo reunir poder mágico nuevamente con mi propia fuerza.
¿Por qué volvieron mis poderes mágicos después de hablar con Gabby?
—Jesse, ¿qué le dije a Gabby antes?
—Eso fue… ¿la joven ya no quiere vivir en armonía con el duque y el pequeño duque…?
—¿……?
—¿Quizás la joven ha cerrado su corazón?
Incluso después de escuchar a Jesse, mis preguntas no quedaron resueltas.
Miré el círculo mágico grabado en mi alma. Cuando miré de cerca, hubo algo que me perdí debido a las fórmulas complicadas.
Supuse que este círculo mágico era un círculo de sellado que había atrapado mi poder mágico y mi alma en este cuerpo.
Pero ahora veo que esto no es sólo una formación de sellado…
«Alguien combinó un círculo de sellado y un círculo de contratación.»
Prueba de que ha hecho un contrato con el diablo. A eso se refiere un círculo de contrato.
«También es mi poder.»
Lo único que el demonio, que a menudo miente y desprecia las promesas, no puede romper es un contrato.
Un contrato con el diablo es cuando el diablo, a cambio de un precio, concede el deseo del contratista. En este proceso presto mi poder.
«El poder del contrato.»
Esto vincula a las partes del contrato y, si el contrato no se cumple, ambas partes reciben el doble del precio.
Si fuera un demonio común y corriente, si rompes el contrato, serás destruido inmediatamente. Aunque es una carga que incluso un demonio de alto rango puede soportar.
Sin embargo, aunque el contrato conlleva tales riesgos, muchos demonios están ansiosos porque no pueden aumentar el número de contratistas. Porque no hay forma más útil de ampliar su influencia.
En cualquier caso, los contratos con el diablo casi siempre se cumplen. Nunca he oído hablar de un caso en el que el diablo haya roto un contrato.
Al observar el círculo de contrato en este cuerpo, Isabella claramente había hecho un contrato con algún demonio.
«Pero el contrato fue hecho por otro demonio, entonces ¿por qué vine a este cuerpo?»
No recordaba haber hecho un contrato con una persona llamada Isabella.
En el contrato del diablo sólo importaba el cumplimiento del contrato. No importa quién lo implementó.
Sin embargo, era raro que alguien que no fuera parte en el contrato ejecutara el contrato.
Si no eres parte, la facultad del contrato no se ejercerá aunque no cumplas el contrato. Existe el riesgo de que el contrato no se cumpla debido a un vacío legal, por lo que, si es posible, las partes se encargan del asunto ellas mismas.
«Por eso sellaron mi poder mágico.»
Sólo entonces entendí el círculo mágico grabado en mi alma. Un círculo mágico que es una mezcla de un círculo de contrato y un círculo de sellado.
Para poder recuperar completamente mi poder mágico y regresar a mi cuerpo original, debo cumplir el contrato que me impuso otro demonio.
—¡Señorita! ¡Finalmente encendí la luz!
Mientras tanto, Jesse, que logró encender la vela, saltó y vitoreó, pero yo simplemente la ignoré.
No sería demasiado tarde para encontrar al demonio que hizo un contrato con Isabella incluso después de regresar a mi cuerpo original.
«Si te encuentro, puedes despedirte eternamente de tu cabeza y tu cuello.»
El círculo mágico grabado en mi alma no puede ser eliminado por mi propio poder.
La idea de quedar atrapada en el plan de otro demonio me hizo apretar los dientes, pero no pude evitarlo. Para volver a mi cuerpo original, no tengo más remedio que conceder el deseo de Isabella.
Entonces, ¿qué deseó Isabella con el demonio que hizo un contrato?
Recordé algo. Después de conocer a Gabby, mi poder mágico volvió, aunque sea un poco. Esto significa que el deseo de Isabel se cumplió parcialmente.
Entonces, ¿el deseo de Isabella no está relacionado con su familia?
No tengo ganas, pero creo que tengo que volver a verlos.
—¿Dónde están esos dos? Abby y Gabby.
Le pregunté a Jesé.
—Uh… ¿se refiere al duque y al pequeño duque?
Asentí a la pregunta de Jesse.
—Están cenando en el comedor del primer piso ahora mismo.
Ante la mención de la cena, miré la cena que Jesse me había traído.
Un manojo de hierba que podría comerse un conejo. ¿Será que la familia del Duque no tiene dinero?
¿Pero por qué yo como en mi habitación y ellos dos en el comedor?
Tenía muchas preguntas, pero no eran aquellas para las que realmente quería respuestas, así que simplemente me encogí de hombros.
—Necesito ver a Abby y Gabby.
Ahora que lo pienso, si juntas los dos, ¿obtienes maldito Abby*?
(N/T: es un juego de palabras. Abby/애비, Gabby/개비 se escriben así respectivamente. Pero si juntas ambas palabras puedes formar 개애비. 개 tiene varios significados dependiendo del contexto. Literalmente significa perro, pero puede utilizarse como un término despectivo como maldito o bastardo.)
Salí de visita con algunos pensamientos tontos en mente.
***
Tan pronto como bajé al primer piso donde estaba el comedor, comencé a olfatear.
Esto huele a carne.
Maldición. Comen carne y solo me sirven pasto.
En el mundo de los demonios, incluso los demonios más bajos y mezquinos no discriminan cuando se trata de comida.
Incluso si es un enemigo al que mataré mañana, lo mataré después de darle una comida completa esta noche.
Como era de esperar, los humanos son malvados.
Giré la comisura de mi boca hacia arriba y abrí la puerta del comedor.
Cuando entré al comedor, todas las miradas estaban puestas en mí.
Como demonio, era sensible a la malicia. Podía sentir la flagrante malicia viniendo hacia mí desde todas direcciones.
«No era sólo la familia la que odiaba a Isabella.»
—Isabella. ¿Qué sucede?
Me preguntó el duque, que acababa de terminar de comer, mientras se limpiaba la boca con un pañuelo.
La ira brotó dentro de mí por la grasa que aún quedaba en su boca.
Aunque había otra alma dentro, el cuerpo era claramente la hija del duque. ¿Pero sólo me dan hierba y ellos comen carne?
—Yo también quiero carne.
—¿Qué?
El duque resopló cuando escuchó mi petición.
—¿No hiciste mucho escándalo por cuidar tu cuerpo, entonces por qué de repente hablas de carne?
En ese momento, Gabby, que estaba sentado al lado del Duque, abrió la boca.
—Que te jodan.
Levanté una ceja ante el lenguaje vulgar que había escuchado por primera vez desde que habité este cuerpo.
Escuché que entre los humanos, los nobles son especialmente malos diciendo palabrotas porque fingen ser nobles.
Miré al duque y vi que su expresión no había cambiado en absoluto. Parece que el lenguaje soez de Gabby no es algo que sucede simplemente en uno o dos días.
—Dijo que quiere comer carne. Maldita sea, ¿la casa del duque ni siquiera tiene dinero para alimentarla con carne?
Gabby dijo eso y llamó al chef.
—¡Chef! ¡Tráeme algunos bistecs a la parrilla ahora mismo!
Después de un rato, había un montón de filetes frente a mí, todavía humeantes.
Tomé un trozo de carne con mi cuchillo de mesa y comencé a morderlo.
Cuando los jugos de la carne tocaron mi lengua, mis ojos se abrieron como platos.
Estaba delicioso. Tenía un sabor completamente diferente al de la carne de monstruo, que tenía que cubrirse con varias especias para eliminar su sabor a pescado.
Miré a Gabby. Si tengo que matarlo más tarde, lo dejaré ir al menos una vez.
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