Dije mientras resoplaba ante el patético comportamiento de Gabriel.
—Avergonzaste a todos los ángeles-.
Por un momento. Ahora que lo pienso, los ángeles deben sentirse humillados, ¿verdad?
Entonces, ¿no hizo algo bien Gabriel…? Dicho esto, no quería elogiarlo bajo ninguna circunstancia.
Continué hablando.
—De todos modos, ese tipo es realmente patético.
Tan pronto como terminaron esas palabras, los ángeles se rebelaron.
La Jen femenina fue la primera en abrir la boca.
—Gabriel es misericordioso-.
—Y era un hombre sabio.
Y el Jen masculino terminó la oración.
Resoplé y dije.
—Viendo las tonterías de las que están hablando, parece que ese ya no es el caso.
—…….
Los dos no refutaron nada de lo que dije.
Concluí simple y claramente.
—Es porque está senil. Gabriel, ¿no es viejo también? Ahora ha llegado el momento en que su cerebro deja de funcionar.
Se sabe que Lilith vivió aproximadamente 100.000 años. Gabriel ha vivido más que Lilith.
Era hora de dar un paso atrás para las generaciones futuras, pero chasqueé la lengua ante el comportamiento tenaz de Gabriel por sobrevivir.
—No es porque esté senil, es por Uriel. Después de que se fue, Gabriel se volvió extraño.
Dijo la Jen femenina.
Uriel.
Lentamente hice rodar el nombre en mi boca.
Ella era un ángel con el poder del contrato.
Al mismo tiempo, es quien me hizo la vida más complicada. Porque Uriel es mi predecesora, la malicia de Gabriel…
«Estoy muy feliz de verte ahora. Te ves tan indefensa.»
Por un momento, me pareció escuchar la voz de Dantalion.
Apreté los dientes. Incluso después de cientos de años, no pude olvidar la impotencia que sentí en aquel entonces.
De todos modos, Uriel me complicó mucho la vida. Para mí, que sólo persigo cosas sencillas y claras, su presencia no debe resultar nada agradable.
Pero curiosamente, cuando pienso en Uriel…
El color de pelo se parece al mío. El color de ojos es….
Parpadeé.
—¿Señorita Bella?
Recuperé el sentido cuando escuché a la Jen femenina llamarme.
¿Qué?
Algo acaba de pasar por mi mente… Me quedé estupefacta por los recuerdos que acababan de desaparecer.
Me mordí el labio suavemente. Fue bastante incómodo, pero decidí seguir adelante por ahora.
Luego, les hice una pregunta a los ángeles.
—Entonces, ¿qué pasa con Gabriel ahora?
—¿Debería decir que tiene demasiado interés en la Tierra Media…?
El Jen masculino se calló. Los dos ángeles se miraron y luego guardaron silencio.
Cuando vi eso, sonreí ampliamente.
—Decidiste convertirme en un mal maestro.
Me estás haciendo usar la violencia para abrir la boca.
Los ángeles abrieron la boca a regañadientes ante las palabras amenazadoras.
—Gabriel ha interferido demasiado en la Tierra Media durante los últimos cientos de años.
—… También empezó una guerra.
Levanté una ceja ante la palabra guerra.
Interferir en la Tierra Media es sorprendente, pero provocar una guerra…
—Dice que es por una gran causa, pero la verdad es que no entiendo cuál es esa causa.
Lo que dijo el Jen masculino tenía sentido.
Incluso si los ángeles no veían a los humanos como iguales, al menos los veían como objetos de protección.
Pero no hay manera de que la causa pueda incluir la guerra.
¿Por qué hizo algo así Gabriel?
No importa cuánto lo pensé, no pude encontrar el significado oculto detrás de sus acciones.
Les hice otra pregunta a los ángeles.
—¿Qué clase de persona era Uriel?
El Jen masculino abrió la boca ante mi pregunta.
—Uriel… Era una persona realmente agradable. Aunque no la conocí por mucho tiempo porque desapareció unos años después de que yo naciera-.
Hubo una serie de elogios que resultaba aburrido escuchar.
Como no tenía ningún interés en escuchar elogios sobre los ángeles, lo interrumpí apropiadamente y le hice otra pregunta.
—Por casualidad, ¿el cabello de Uriel es rojo?
Fue una pregunta un tanto impulsiva. ¿Qué importa el color de pelo de un ángel ya muerto?
Pero, por extraño que parezca, realmente quería confirmar este hecho.
—Oh, ¿cómo sabes eso?
—¿Es rojo?
—Así es. Era un color rojo muy intenso. Cómo una puesta de sol.
Este hecho inesperado me conmovió.
—Ahora que lo pienso.
La Jen femenina me preguntó como si se le hubiera ocurrido algo.
—¿El color del cabello está determinado por el poder? La verdadera apariencia de la señorita Bella es pelirroja.
—… De ninguna manera.
Negué con la cabeza ante lo que añadió.
Nunca he oído que el color del cabello esté determinado por el poder.
Ahora sentí que me faltaba algo muy importante.
Pero no tenía forma de saber qué era.
—Pensemos en ello más tarde.
Intenté reprimir mi sentimiento de inquietud.
***
Al día siguiente vinieron a visitarme invitados inesperados.
—Duque. Mucho tiempo. Estoy feliz de verlo.
Saludé primero al duque.
En realidad, no ha pasado tanto tiempo… Por alguna razón, ¿parece que ha pasado un tiempo desde que vi la cara del duque?
—Isabella. Tu tez…Ha mejorado mucho.
—¿Es así?
Me toqué la mejilla por reflejo. Definitivamente parece que he ganado peso.
Aunque todavía estaba ridículamente delgada para los estándares de un diablo.
Para superar una dura prueba, ¿no es necesario comer bien y coger fuerzas?
He tenido muchas cosas en la cabeza estos días, así que he estado tratando de comer mejor y parece que se nota.
—En cuanto a los otros dos, no ha pasado tanto tiempo y no estoy muy feliz de verlos.
Miré al Sumo Sacerdote y a Kaiden que estaban detrás del Duque y luego hablé.
Dejando a un lado a Kaiden, ¿por qué vino el sumo sacerdote a la residencia del duque?
—Cuenta chistes con mucha picardía.
El sumo sacerdote habló con una sonrisa amistosa.
Yo también quiero decir esto con una gran sonrisa.
—No es un chiste, ¡Ay!
El duque me dio un codazo en el costado, dándome una pista.
Cuando miré al Duque con expresión perpleja, él negó con la cabeza.
«Ten cuidado.»
El duque me dijo eso en silencio.
Me sentí mal por el comportamiento repentino del Duque, pero seguí sus palabras por ahora.
El duque salió y guió a los invitados al salón.
Me quedé mirando a los invitados no invitados en una postura torcida y con las piernas cruzadas.
El duque pareció disgustado con mi postura, pero no se molestó en señalarlo.
El sumo sacerdote tomó un sorbo del té servido por sus asistentes y luego habló con una sonrisa serena.
—Después de ese día me preocupé mucho por la Santa.
—Es la preocupación más inútil del mundo.
—Me alegro de que esté bien.
El sumo sacerdote volvió a sonreír con su característica sonrisa amistosa.
Tan pronto como vi esa sonrisa, me sentí mal.
El Sumo Sacerdote no me ha hecho nada malo todavía, así que, ¿por qué siento tanta repulsión cuando lo veo?
Miré a Kaiden, que estaba sentado junto al Sumo Sacerdote.
Todavía tenía una expresión tranquila como siempre.
Volví mi mirada hacia el sumo sacerdote.
Abrí la boca, preguntándome cuánto tiempo podría sonreír así.
—Ayer tuve una conversación con el Dios celestial.
—¡Vaya! Veo.
—Hablamos de usted también.
—¿Puedo preguntar qué hablaron?
—Dijo que le gustaría ver tu rostro pronto.
Según la Biblia humana, cuando las personas con altas creencias religiosas mueren, van al cielo y se encuentran con el dios celestial.
Por supuesto, es absurdo, pero, ¿acaso los humanos no lo creen completamente?
En resumen, le dije al sumo sacerdote que moriría pronto.
Tan pronto como terminé de hablar, el duque se llevó la mano a la frente.
Por otro lado, el Sumo Sacerdote todavía me habló con una sonrisa en el rostro.
—Eso es realmente un honor.
¿Mmm?
¿No te enojas al escuchar algo así?
Fruncí el ceño. Estoy tan decidida a empezar una pelea, pero no puedo creer que tenga una reacción tan aburrida.
Ya no tenía ganas de pelear.
Después de eso, la charla unilateral del sumo sacerdote continuó.
Se trataba principalmente de alabar lo grande que era el Dios celestial.
Fue toda una prueba para el duque, que carecía de fe religiosa, y para mí, que estaba llena de blasfemia, escucharlo.
El duque respondía ocasionalmente a las palabras del sumo sacerdote, pero tampoco se veía muy bien.
Cuando el Sumo Sacerdote quedó muy absorto y comenzó otro discurso sobre la grandeza del Dios Celestial.
Le susurré al duque en voz baja.
—Abby. ¿Dónde está Gabby ahora?
—Isabella, no es de buena educación susurrarle algo frente a un invitado. ¿Y por qué buscas a Gabriel?
—Creo que se solucionará rápidamente si dejo a Gabby aquí. En particular, podríamos expulsar al sumo sacerdote de inmediato.
—Tratas a tu hermano como una especie de animal, pero… lo que dices tiene sentido.
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