Jiang Yinyin y Shen Xicheng estaban en una pequeña habitación privada. Originalmente, la casa de té era tranquila y la habitación privada lo era aún más.
Ninguno de los dos sabía cómo comenzar esto, pero Jiang Yinyin fue la primera en romper el silencio, hablando francamente, dijo.
—¿Lo crees?
Si no lo creyera, ¿por qué Shen Xicheng conduciría con tanta prisa hasta aquí?
Pero, ¿cómo podía creerlo? Si este asunto no le hubiera sucedido a ella, una mujer empobrecida y un rey de diamantes rico y poderoso, incluso ella habría supuesto que intentaba chantajearlo con dinero.
Shen Xicheng la miró.
—No tienes motivos para mentirme.
¿No tiene? ¿No le preocupa que lo esté engañando por dinero? O si tiene una ambición más grande, ¿querer ocupar la posición de la Sra. Shen?
Jiang Yinyin finalmente entendió por qué la ex actriz de Chen Pei, Ren Xintong, puso todo su corazón en Shen Xicheng. Las personas como él obviamente no son muy buenas en cuanto a rasgos faciales, pero cuando dijo esto, Jiang Yinyin tuvo una sensación inexplicable.
Después de que eso sucedió, después de hablar con él y su comportamiento, en realidad no podía odiarlo.
Jiang Yinyin bajó la cabeza para ocultar las emociones en sus ojos y dijo con una sonrisa.
—Pensé que no lo creerías. Después de todo, ni siquiera puedo creer que esté embarazada.
Este tipo de cosas con una probabilidad muy pequeña casi nunca sucederían, pero ahora le estaba sucediendo a ella.
Es difícil para Shen Xicheng creerlo. Solo esto, solo porque no dudaba de si el niño en su útero era suyo, fue suficiente para que Jiang Yinyin, una mujer que era más emocional que racional, se sorprendiera.
La mirada de Shen Xicheng pasó de su rostro a su estómago y luego se movió a otros lugares muy rápidamente.
—No importa cuán pequeña sea la probabilidad, no significa que no pueda suceder.
—¿No sospechas que el niño en mi vientre puede ser de otra persona?
Probablemente porque era difícil entender por qué la mujer preguntó demasiado sobre los detalles de este asunto, Shen Xicheng se quedó en silencio durante unos segundos y luego dijo lentamente.
—No.
—¿Por qué?
Incluso si ella fuera Shen Xicheng hoy, todavía sospecharía.
—No tienes motivos para mentirme. —respondió Shen Xicheng nuevamente. —No eres alguien que mentiría sobre este tipo de cosas.
Jiang Yinyin sintió ganas de reír.
Entre ellos, sin contar esta reunión, se encontraron dos veces en total. La primera vez no hubo conversación, y la segunda vez no fue profunda. Se podría decir que no sabían nada de la otra parte, pero cuando él dijo que ella no era alguien que mentiría sobre este tipo de cosas, sonó como si la conociera desde hace muchos años.
Así es, ¿cómo se atreve una personita como ella a mentirle? Los superiores generalmente no son tontos, una vez que se expone la mentira, las consecuencias no son algo que una persona como ella pueda permitirse, por lo que Shen Xicheng confía en que no se atrevería a mentir.
Jiang Yinyin volvió a guardar silencio. Ella y Shen Xicheng eran extraños que no tenían nada que ver entre sí, y era imposible que se encontraran en esta vida. Ahora que tienen un hijo en común, siente una indescriptible sensación de impotencia.
—Viniste aquí hoy creyendo en mí. —Jiang Yinyin respiró hondo y levantó la cabeza para mirar a Shen Xicheng. —¿Cuál es tu decisión?
—Lo siento. —se disculpó Shen Xicheng nuevamente.
Si hubiera sido más cauteloso en ese momento, es posible que nada de esto hubiera sucedido hoy.
Jiang Yinyin sabía por qué se disculpó, pero no quería insistir demasiado en este tema, después de todo, quedó embarazada, lo cual no era lo que esperaba Shen Xicheng.
—Señorita Jiang, la decisión es suya. —dijo Shen Xicheng. —No importa qué decisión tome, la respetaré.
Esto hizo que Jiang Yinyin se sorprendiera un poco.
Pensó en varias posibilidades, pero no esperaba que él dijera eso.
¿Depende de ella decidir?
Jiang Yinyin se rió tontamente, no creía lo que dijo Shen Xicheng.
—¿Puedo hacer lo que quiera?
Shen Xicheng hizo una pausa y asintió.
—Entonces, si digo que quiero casarme con usted y ser la señora Shen, ¿lo aceptaría? —Cuando Jiang Yinyin preguntó esto, su tono fue un poco brusco.
Esta agudeza enriqueció su expresión en este momento. Ella no entendía, ¿fue por la anfitriona original que sucedió esto o por ella? ¿Por qué le sucedieron estas cosas tan absurdas?
En primer lugar, la anfitriona original solo quería agradecerle al Sr. Chen, pero involuntariamente se emborrachó y luego fue drogada.
Se convirtió en Jiang Yinyin, así que hizo una apuesta para escapar de algo así, pero todo volvió a ella.
¿A quién puede culpar ahora? No puede culpar a nadie.
Al verla así, la expresión de Shen Xicheng finalmente cambió, justo cuando Jiang Yinyin pensó que diría algo, asintió.
—Sí.
***
Por supuesto, Jiang Yinyin no pensaba casarse con Shen Xicheng.
Era consciente de sí misma, sin mencionar la falta de afecto entre ella y Shen Xicheng, tenía cosas más importantes que hacer.
Ahora que Shen Xicheng le dijo que la decisión recae en ella, parece que a él no le importa este niño.
Jiang Yinyin fue a la casa de familia a empacar sus cosas, luego envió un mensaje de WeChat a Qingming y siguió a Shen Xicheng al automóvil, lista para regresar a la capital imperial.
Después de sentarse en el automóvil, Shen Xicheng le entregó una botella de agua mineral y le dijo.
—La comida en la bolsa del asiento es para ti. Si tienes hambre, primero llena tu estómago.
Jiang Yinyin abrió la bolsa y echó un vistazo. Había una caja de frutas lavadas, pan y leche dentro. El recibo todavía estaba dentro. Fue comprado hace unas horas. Volvió a mirar a Shen Xicheng, que estaba concentrado conduciendo, y de repente se dio cuenta de que se había equivocado.
Si no se preocupara por el niño, no habría conducido hasta aquí durante horas ni habría preparado estas cosas para ella.
Pensó en lo que le dijo Chen Pei. Shen Xicheng tiene treinta y tantos años este año, trece años mayor que ella, y los miembros de su familia lo instan a casarse y también conceden gran importancia a sus herederos, entonces, ¿qué hay de él?
A mitad de camino, Jiang Yinyin pensó por un momento y dijo.
—Sr. Shen, lo que dije hace un momento no es lo que pienso, no se preocupe, conozco la combinación correcta*, no quiero casarme con usted, y tampoco pienso amenazarlo con este niño. Lo crea o no, realmente no codicio nada.
(N/T: se refiere a que las condiciones familiares deben ser iguales para que el matrimonio sea adecuado.)
Aunque ahora no tiene dinero ni nada, nunca ha pensado en usar al niño que lleva en su vientre para conseguir algo a cambio.
Lo que acaba de decir, fue solo un comentario producto de su enojo, simplemente espera que Shen Xicheng no lo tome en serio.
—Lo sé. —la voz de Shen Xicheng era grave. —Señorita Jiang, no importa la decisión que tome, la respetaré. No necesita pensar en otras cosas, solo considere su propio corazón.
—¿Qué quiere decir?—Preguntó Jiang Yinyin.
—Si quieres dar a luz a este niño, haré de este niño un miembro legítimo de la familia Shen. En el futuro, podrá ver a este niño cuando quiera, o incluso cuidarlo usted misma. Si no quiere dar a luz a este niño, entonces buscaré el mejor hospital para usted y encontraré a alguien que la cuide. Si está dispuesta a casarse conmigo, lo arreglaré inmediatamente. —Esta es la primera vez que Shen Xicheng dijo una oración tan larga a Jiang Yinyin. —Señorita Jiang, sé que no quiere ninguna compensación, ni tampoco usar a este niño para intercambiar algo. Pero sé que este cambio tan grande en su vida actual fue causado por mi culpa. Entonces, no importa lo que decida, lo compensaré de una manera que sea aceptable para usted.
¿En verdad piensa darle todo el poder de decisión a ella?
Los párpados de Jiang Yinyin cayeron, mirando su estómago plano, dijo en voz baja lo que sentía en su corazón.
No tiene el coraje de ser una madre soltera, pero si quiere dar a luz a un niño, como madre, ¿realmente puede aceptar estar separada de su propio hijo?
Aunque Shen Xicheng dijo que ella podía cuidar al niño, ¿la familia Shen realmente lo permitirá? Ya no se atrevía a apostar más.
Si ella fuera un espectador, definitivamente sugeriría a la otra parte que abortara al niño, después de todo, esta es la mejor manera desde cualquier punto de vista.
Pero ahora que el niño está en su estómago, ella también se volvió indecisa.
Sin embargo, sin importar cuán indecisa fuera, Jiang Yinyin sabía que definitivamente tomaría la mejor decisión para ella.
Shen Xicheng dejó a Jiang Yinyin en su casa de alquiler en la capital imperial y se fue.
Chen Pei no tenía intención de hacer nada en absoluto. Al ver a Jiang Yinyin de regreso, se apresuró a preguntar.
—Yinyin, ¿estás bien?
Jiang Yinyin se sentía muy cansada, pero asintió con la cabeza.
—Estoy bien.
—Shen Xicheng te encontró, ¿no es así?— Chen Pei se arrepintió cada vez más y finalmente tiró de su cabello con ira. —¡No debería haberlo llamado, todo es mi culpa!
En realidad, Jiang Yinyin sabía lo que estaba pensando Chen Pei. Sonriendo, dijo.
—Ya pasó, y Shen Xicheng me dijo que no importa lo que decida, él no interferirá.
Esta es probablemente la única cosa por la que puede estar satisfecha en este momento.
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