Ñam.
Cuando terminé mi quinta tarta, Nigel me miró con ojos lastimeros.
—¿Cuántos años tienes para que te gusten tanto las cosas dulces?
Dije después de tragar la tarta en mi boca.
—Parece que eres viejo y tu lengua se ha adormecido, pero la mía todavía no.
Resistí la tentación de chasquear la lengua hacia Nigel.
No puede hacer algo así de infantil cuando tiene 600 años.
—Y como no sé cuándo volveré a comer, ahora estoy comiendo mucho.
Cuando termine este incidente, no sé cuándo regresaré a la Tierra Media.
Hubo algunas cosas bastante agradables que sucedieron después de entrar en el cuerpo de Isabella… Sin embargo, eso no fue suficiente para cambiar mis pensamientos sobre la Tierra Media.
Probablemente nunca volveré a la Tierra Media por mi propia voluntad.
Nigel entendió lo que quería decir e hizo una expresión confusa.
Mmm. ¿Se ve así porque me extrañará?
Normalmente no doy la bienvenida a las visitas, pero puedo hacer una excepción con Nigel.
Dije con una expresión benévola en mi rostro.
—Si quieres verme, ven al mundo de los demonios.
—¡Oye! No es tan malo, ¿verdad? Podemos sobrevivir sin vernos seguido, ¿no?
Nigel dijo enojado.
—Bueno, digamos que sí.
Parecía avergonzado. Me encogí de hombros,
Después de ajustar mi postura en el sofá, elegí uno de los libros sobre la mesa.
Fue una de las novelas populares que compré en la librería el otro día.
Nigel se sentó frente a mí y miró el libro que tenía en la mano.
—¿Es eso divertido? ¿Cómo puedes ver a los demonios así?
—Es interesante. En particular, lo que hacen los demonios aquí es muy interesante.
—¿Interesante?
Cuando Nigel preguntó, asentí.
Lo que tienen en común las novelas populares que presentan a los demonios es una falta general de comprensión de los demonios.
Especialmente este libro.
—El demonio que aparece como uno de los protagonistas masculinos aquí hace cosas que no son diabólicas en absoluto.
Una guerra de nervios entre dos hombres con una mujer. Esto se llama triángulo amoroso, ¿verdad?
En el mundo de los demonios, era muy difícil que se formara tal triángulo amoroso.
—En estos casos, los demonios suelen optar por eliminar a sus rivales en lugar de intentar cortejarlos con más fuerza.
—…Eso es tan bárbaro.
—Respeta las diferencias culturales. Y es eficiente.
Si la otra persona no puede elegir entre opciones, una opción es eliminar las opciones.
Nigel puso una expresión de desconcierto al escuchar lo que dije.
—Dijiste que este libro fue hecho por tus subordinados, ¿verdad? La próxima vez, escribe un libro realista y tráelo de vuelta.
—… Como bien dices, no es una novela romántica, sino una novela de suspenso. Nadie lo leerá.
En ese momento, la puerta se abrió con un fuerte grito.
¡Kamang!
—¡Blackie! ¡Por favor no corras!
Detrás de él, Jesse perseguía a Blackie mientras sostenía una toalla.
Le pedí a Jesse que bañara a Blackie, pero parece que Blackie salió corriendo antes de que pudiera secarle el pelaje.
Blackie inmediatamente saltó a mis brazos.
Era muy lindo, pero el libro que tenía en la mano se mojó porque el agua goteaba por todo su cuerpo.
Tsk.
Chasqueé mi lengua una vez y dejé escapar un poco de magia. Entonces, el pelaje de Blackie se secó en un instante.
—¿Oh? Señorita, ¿qué acaba de hacer?
—Es poder divino.
—¿Usó poder divino para secar el pelaje del Sr. Blackie? El poder divino es tan… ¿útil?
Cuando le di una breve explicación, Jesse inmediatamente pareció creerme.
Grrrrr.
Blackie se sentó en mi regazo y le enseñó los dientes a Nigel.
Nigel resopló al ver a Blackie.
—¿Cómo conseguiste algo así?
—¿Algo así? Oye, cuida tu lenguaje.
—Oye, puedo entenderlo con solo mirarlo. No sé por qué esa bestia te está adulando, pero sabes que no es una bestia común, ¿verdad?
Es posible que Nigel fuera consciente de que Jesse estaba en la misma habitación, pero usó la palabra bestia en lugar de monstruo.
—No es que esté siendo mezquino: Blackie es naturalmente muy lindo.
—¿Cómo puedes dejar de ser tan selectiva con ese tipo? Supongo que solo tiene encanto para ti.
Hice un puchero cuando escuché el término «observación selectiva».
Bueno, no estuvo mal.
Mientras reinaba como monarca del mundo de los demonios, rara vez tenía que preocuparse por lo que pensaban los demás.
Naturalmente, mis sentidos comenzaron a activarse sólo en emergencias o cuando era realmente necesario.
Otras situaciones… Si estaba a mi favor, fingía no darme cuenta.
De hecho, hay casos en los que realmente no te das cuenta.
Grrrrr.
Cuando Blackie le gruñó a Nigel una vez más, Nigel abrió la boca.
—No hay necesidad de mantenerme bajo control, ¿Sabes? No quiero tu posición. Bueno. A menos que me vuelva loco…
—¿Ustedes dos pueden comunicarse?
—¿Podría ser posible? Simplemente me expresé en voz alta.
Jesse, que estaba limpiando su habitación, escuchó nuestra conversación y abrió mucho los ojos.
Cuando la miré para ver por qué reaccioné así, Jesse se acercó a mí y me susurró al oído.
—Señorita, creo que ese nuevo sirviente es demasiado arrogante.
—¿Arrogante?
—Sí. Si está a ese nivel…
Jesse fingió cortarse el cuello con la hoja de su mano.
—¿Quieres matarlo?
—¡No! ¿En qué tiempos vivimos estos días? ¿Cuándo los nobles matan a los plebeyos descuidadamente? Un sirviente tan arrogante debería ser despedido de la residencia del duque.
Ah.
Sólo entonces entendí la reacción de Jesse.
Tsk. A los ojos de Jesse, que no sabe nada, podría parecer así.
Le expliqué a Jesse.
—Peludo es mi amigo.
—… Es Nigel, no Peludo. ¡Sé que dijiste mal mi nombre a propósito!
Chasqueé la lengua cuando vi que Nigel se enojó sólo por el nombre.
—Como puedes ver, tiene una personalidad sensible. Jesse, debes enseñarle bien.
Jesse no respondió a lo que dije, probablemente porque estaba preocupada por otra cosa.
Murmuró algo para sí misma, luego de repente levantó la cabeza, me miró y dijo.
—Por lo tanto… La dama ahora es…
Los ojos de Jesse eran particularmente brillantes.
Sentí una extraña corriente en esos ojos.
—Señorita, ¿está trayendo en secreto a su amigo de la infancia a la residencia del duque disfrazándolo de sirviente?
—¿Por qué parece que estás pensando algo extraño?
—¡Kyaaaa! ¿No es esto demasiado romántico?
—… tú. Detén tus engaños.
Jesse estaba dejando volar su imaginación, agregando cosas que yo ni siquiera dije.
Teniendo en cuenta que Jesse estaba obsesionada con las novelas populares, estaba claro lo que estaba pensando.
Imaginar a Nigel y a mí teniendo ese tipo de relación…
Qué asco.
Sentí náuseas.
Nigel también tenía mala expresión.
Le aclaré apresuradamente a Jesse.
—No. Nigel no es nada de eso. Solo somos amigos.
—¿Qué? ¿Es así de guapo, pero es sólo un amigo?
La reacción de Jesse me hizo detenerme por un momento.
¿Por qué dices que Nigel es guapo?
Nigel, es decir, ¿Peludo no tiene una cara que alguien apenas puede admirar?
Cuando le dije a Jesse mi opinión, se sorprendió una vez más.
—¡No! ¡Esa persona! ¡El amigo de la joven, Peludo, es un hombre bastante guapo!
—Me gustaría respetar tus gustos, pero no siento lo mismo.
—¿Han olvidado ustedes dos que estoy aquí?
Ignoré ligeramente las palabras de Nigel y seguí hablando.
—No importa cuánto intente mirar hacia afuera en lugar de hacia adentro, Nigel es un poco… No.
Cuando lo negué con vehemencia, las dudas de Jesse parecieron disiparse gradualmente.
—Nigel es un viejo amigo mío. Le impidí vagar por las calles porque no tenía un trabajo adecuado.
Sí. Esta es una explicación perfecta.
—Ah. Entonces esa persona es-. Ah, me equivoqué. Es sólo un sirviente.
Sólo entonces Jesse aclaró por completo sus dudas.
Jesse empezó a limpiar la habitación de nuevo. Nigel, sentado frente a mí, me miró con expresión molesta.
—¿Vagar por las calles? ¿No tengo un trabajo adecuado?
—¿No es así? Tu antiguo trabajo no era muy bueno.
No se puede considerar que ser el líder de los adoradores del diablo sea un trabajo decente.
Nigel pareció estar de acuerdo con lo que dije.
—Bueno, digamos que sí.
Nigel me miró y volvió a hablar.
—Pero Bella, honestamente, no es que no te importe la apariencia.
—De qué estás hablando.
—Puedo saberlo con sólo mirar tu rostro.
Inmediatamente supe de quién estaba hablando Nigel.
Miré a Nigel con expresión severa. Nigel debió haber visto mi expresión, pero siguió hablando sin prestar atención.
—Simplemente tienes estándares tan altos que tratas todo lo que está por debajo de tus estándares como igual.
—Jesse. Tráeme otro plato de tartas.
Después de sacar a Jesse de la habitación, comencé a hablar.
—Eres bastante perspicaz. ¿Pero por qué me hablas de eso ahora?
Estoy segura de que sabe que no me gusta hablar de Zachary.
Nigel no respondió a mi pregunta, sólo se encogió de hombros y dijo algo más.
—De todos los humanos, ángeles y demonios que vi… eres el más caprichoso y arbitrario de todos los seres.
—Puedo afeitar tu pelo.
—Ah, ¿pero también tienes un lado que secretamente cuida de los demás? Si no fuera por eso, no me habría convertido en tu amigo. Entonces mi vida habría sido mucho más tranquila de lo que es ahora…
—… ¿Qué piensas hacer?
—¿Qué más? Estoy tratando de arreglar la retorcida historia de amor de mi mediocre amiga.
Miré a Nigel con expresión perpleja.
¿Mi historia de amor?
Como dije repetidamente, Zachary y yo no teníamos ese tipo de relación.
Las citas consistían simplemente en tomarse de la mano y besarse.
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