—Ha… Estoy agotada, necesito otra taza de café antes de seguir, el examen será mañana temprano. —Dijo en voz alta una joven, la cual estaba sentada sobre una mesa repleta de archivos, cuadernos y libros.
¡¡BURRRP!!!
Se escuchó un fuerte eructo venir desde la habitación contigua.
—Papá, ¿estuviste bebiendo de nuevo? Vamos levántate, tengo que irme a trabajar ahora, vamos limpia esto, vomitaste toda la cama. —Dijo la joven recibiendo de respuesta una fuerte bofetada de su padre.
¡PLASSS!
—Te dije que no me hablaras así, limpia tú, yo tengo que ir a una reunión ahora, vamos, sirve de algo mocosa. —Respondió el padre mientras que se ponía de pie con dificultad.
La joven miró a su padre molesta, su madre había muerto hace ya cinco años y desde entonces se había quedado sola con su padre en casa, “Estoy cansada de esto. Quisiera irme de aquí, pero no tengo dinero suficiente para rentar un lugar, todo mi sueldo se va en mis estudios y los gastos de la casa” pensaba la joven. Al terminar de limpiar un poco tomo su mochila y guardo sus cuadernos corriendo rápidamente a su trabajo.
[Horas después]
—Alicia, deberías tomarte un descanso, no has comido nada en más de ocho horas de trabajo, vamos le diré a Lucia que te remplace. —Dijo el jefe del restaurante.
—No se preocupe, puedo seguir, yo… En realidad necesito estas horas extras, las propinas que dan el día de hoy han sido muy buenas y creo que…-La joven iba a seguir hablando, pero un fuerte mareo la hizo detenerse.
— ¡Alicia! ¿Oye estás bien?, te lo dije, ve a descansar por unos minutos. —Repitió el jefe mientras que ella negaba con la cabeza.
Ella se levantó y siguió su turno hasta que se hizo la hora de salir y entrar a la universidad. Ella se preparó rápido para salir del trabajo tomando su mochila y corriendo hacia la universidad, “Es tarde, es tarde, ¿qué voy a hacer si no alcanzo a llegar?”, pensaba ella mientras corría por las calles de la ciudad, a pocas cuadras después cayó al suelo con un gran dolor de cabeza “¿Qué? Este dolor de cabeza no se ha detenido desde ayer” La joven intento levantarse, pero sentía que el suelo se movía bajo sus pies, fue entonces que su vista se nubló y cayó al suelo fuertemente.
[Destello]
El frío parecía envolver su cuerpo, el cual se sentía mojado. Al abrir con dificultad los ojos pudo ver el rostro de una mujer adulta, “¿Quién es esta mujer?”, la joven sentía como la levantaban del suelo y la miraban con el ceño fruncido, ¿cómo era capaz esa mujer de levantarla? ¿Y por qué la joven no podía decir ni una palabra, aunque lo intentara?
— ¡Manuel! ¡Alguien ha dejado un bebe en la entrada! —Grito la mujer mientras llevaba al bebe en sus brazos dentro de la casa.
La joven no entendía nada “¿Bebe? ¿De qué bebé hablan?” Se preguntó la joven intentando hablar, pero escuchando solo unos balbuceos incomprensibles“¿He? ¿Qué? Mis manos, ¿estas son mis manos?”, la joven miro sus manos, las cuales se veían extremadamente pequeñas y regordetas, fue entonces que se dio cuenta al pasar por delante de una ventana que su reflejo era el de una pequeña bebé recién nacida “¿Qué? ¡¡¡Noooo!!! ¿Qué es esto?”, grito preguntándose para sí misma, mientras que la mujer la llevaba a una gran habitación donde estaba repleto de niños pequeños, todos ellos se veían cansados, sucios y desnutridos.
[Ocho años después]
— ¡¿Dónde se metieron esos mocosos?! ¡Búscalos mujer! ¡Sin ellos no podremos hacer que nos sigan enviando dinero! —Se escuchaban los fuertes gritos de un hombre retumbar en las calles entre la gente.
—Shh… no hagan ruido, todo está bien, solo debemos aguantar hasta la mañana y estaremos a salvo. —Dijo una pequeña niña de cabello lila y ojos celestes con una mirada seria.
Los gritos del hombre buscando a los niños se alejaban poco a poco del lugar donde se encontraba la niña escondida con sus amigos, hasta que estos gritos se hicieron completamente imperceptibles.
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